Ese ejercicio físico repetido y obligado para subsistir lo utiliza también el organismo como catalizador del desarrollo craneal y corporal
Para ejercitar la masticación de manera adecuada es preciso que la máquina esté bien montada y conjuntada para realizar adecuadamente su función. De no ser así el proceso se bloqueará adoptando formas anómalas de alimentación que no corresponden con lo que el sistema debe realizar según su programación.
Esta situación es demasiado frecuente en nuestra civilización debido al escaso esfuerzo realizado en el primer año de vida para tonificar la musculatura masticadora y facilitar el engranaje perfecto de las diferentes piezas del sistema (dientes y articulaciones).
Con frecuencia nos encontramos niños que les cuesta gran esfuerzo el comer. Niños a los que el momento de la comida se ha convertido en una tortura desagradable debido a su incapacidad para procesar los alimentos duros y correosos.
Esos niños son los que hacen "BOLA" con la carne por la imposibilidad que padecen para triturar. Una deficiente organización de su sistema dentario les impide la masticación y les frena en su desarrollo.
Niños que únicamente realizan movimientos de apertura y cierre, y que prensan y exprimen la carne convirtiéndola en una bola seca difícil de tragar.
Todo ello debido a la incomodidad del sistema para realizar la labor de frote dentario y trituración del alimento.
Continúa en la página "LA COMIDA IMPOSIBLE"
